Funcionario de ambiente dijo que eso es competencia de HidrocaribeA una semana que un diario local señalara los riesgos que corren varias familias ubicadas en el sector La Aventazón de El Tigre, ningún organismo se ha hecho presente en las propiedades dañadas con las aguas contaminadas, mientras que la autoridades del municipio Simón Rodríguez luego de atender a una de las familias, sólo les llegó a decir que eso no se podía ventilar en los medios debido a que causa daño a la “imagen” del municipio.
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junio,02/2010
junio,02/2010
El dirigente oficialista Giovanni Urbaneja se hizo presente en el lugar donde las aguas putrefactas invadieron la propiedad, y desde allí contactó vía telefónica a Ezequiel Romero, director de la oficina del Ministerio de Ambiente en la zona, quien dijo desconocer del problema, además opinó que eso era competencia de la empresa Hidrocaribe.
No obstante, la familia más afectada por la invasión putrefacta debió extremar las medidas ante la inminente nueva arremetida de las aguas, producto de las lluvias caídas en las últimas horas en la zona.
Richard Valor y su esposa Yajaira Lara, mostraron fotos y otros documentos, uno de ellos donde el Consejo Comunal del sector les respalda en la urgencia que atraviesan por el desborde de las aguas de la laguna de oxidación.
La señora afectada dijo que en la alcaldía quedaron en enviar una comisión, pero hasta ahora nada de eso ha ocurrido, mientras animales propiedad de la familia y plantas en plena carga y cosecha, están sumergidos en las aguas putrefactas sin poder ser recogidas por la alta contaminación.
La ama de casa mostró varias fotografías al igual que mostró otras áreas cercanas a la casa entre ellas una cosecha de maíz, y otras plantas que se perdieron.
“No nos explicamos que pasa con las autoridades, este problema lleva ocho meses y nada que hacen algo para remediarlo, está en juego la salud no solo de nosotros y quienes vivimos por el sector, existe un riesgo latente de que se propaguen enfermedades a la ciudad por la alta contaminación existente con las aguas de la laguna de oxidación cuyo paradero es un misterio” dijo.
Pérdidas cuantiosas
Las pérdidas son cuantiosas señala Richard Valor, pero temen más por la salud de los niños y de los residentes del lugar.
“Ya las plagas no nos dejan dormir, parece que las denuncias nadie les para porque quizás teman a las responsabilidades, ni Hidrocaribe ni ambiente se pronuncian y la salud de quienes vivimos por aquí está resultando afectada. Mi casa queda a siete kilómetros de la laguna, esa está seca y nadie a donde van a parar las aguas de El Tigre, lo que si estoy seguro es que una buena parte de la laguna se metió en mi propiedad y en la alcaldía hablan de construir un muro de contención” dijo.
Finalmente los afectados manifestaron que hasta ahora nada han hecho los organismos para solventar o ayudar a paliar el problema grave de salud.
Esperan que Hidrocaribe y el Ministerio del Ambiente asuman la responsabilidad del problema o de lo contrario cuando vayan a tomar acciones puede ser tarde y mientras el tiempo corre y las aguas podridas también.
No obstante, la familia más afectada por la invasión putrefacta debió extremar las medidas ante la inminente nueva arremetida de las aguas, producto de las lluvias caídas en las últimas horas en la zona.
Richard Valor y su esposa Yajaira Lara, mostraron fotos y otros documentos, uno de ellos donde el Consejo Comunal del sector les respalda en la urgencia que atraviesan por el desborde de las aguas de la laguna de oxidación.
La señora afectada dijo que en la alcaldía quedaron en enviar una comisión, pero hasta ahora nada de eso ha ocurrido, mientras animales propiedad de la familia y plantas en plena carga y cosecha, están sumergidos en las aguas putrefactas sin poder ser recogidas por la alta contaminación.
La ama de casa mostró varias fotografías al igual que mostró otras áreas cercanas a la casa entre ellas una cosecha de maíz, y otras plantas que se perdieron.
“No nos explicamos que pasa con las autoridades, este problema lleva ocho meses y nada que hacen algo para remediarlo, está en juego la salud no solo de nosotros y quienes vivimos por el sector, existe un riesgo latente de que se propaguen enfermedades a la ciudad por la alta contaminación existente con las aguas de la laguna de oxidación cuyo paradero es un misterio” dijo.
Pérdidas cuantiosas
Las pérdidas son cuantiosas señala Richard Valor, pero temen más por la salud de los niños y de los residentes del lugar.
“Ya las plagas no nos dejan dormir, parece que las denuncias nadie les para porque quizás teman a las responsabilidades, ni Hidrocaribe ni ambiente se pronuncian y la salud de quienes vivimos por aquí está resultando afectada. Mi casa queda a siete kilómetros de la laguna, esa está seca y nadie a donde van a parar las aguas de El Tigre, lo que si estoy seguro es que una buena parte de la laguna se metió en mi propiedad y en la alcaldía hablan de construir un muro de contención” dijo.
Finalmente los afectados manifestaron que hasta ahora nada han hecho los organismos para solventar o ayudar a paliar el problema grave de salud.
Esperan que Hidrocaribe y el Ministerio del Ambiente asuman la responsabilidad del problema o de lo contrario cuando vayan a tomar acciones puede ser tarde y mientras el tiempo corre y las aguas podridas también.
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